domingo, 25 de noviembre de 2012

Capitulo 30

Holaaaaaaaa!! Aquí otra semana mas, y ya el capitulo 30 Wohooo!! Nunca pensé que llegaría a escribir tanto.
Bueno deciros que este capitulo mas de uno/a lo estaban esperando con ganas jejeje
Una mención especial: @josejo26 cielo te lo dedico por algo que leerás y te encantara que lo se yo ;)
Y bueno que también se lo dedico a todos mis lectores que sois lo mejor y que gracias por esos comentarios que hacen que tenga ganas de seguir escribiendo! Os amoooo
Pues nada duendecillos míos os dejo disfrutar de este capi! Un montón de amor LOVE UUUUU GUYS!!!! ;)


NARRA SARAH

Le había pedido perdón, realmente sentí que tenía que hacerlo, el se había puesto así por mis miedos, pero me sorprendió cuando él me pidió perdón a mí, se separo un poco de mí y me miro, mis ojos estaban ligeramente humedecidos, me acaricio la mejilla con el dorso de su mano y acto seguido cerré los ojos y suspire.
-John. . . susurre, pero antes de que siguiera hablando el me corto.
-Shh, no digas nada Sarah, perdóname por comportarme como un idiota, lo siento, no debería haberte hablado así, por favor preciosa perdóname, y una lagrima cayo de sus ojos.
-Te perdono John, dije con un hilo de voz, levante mi mano y seque la lágrima que corría por su rostro, me dedico una pequeña sonrisa que yo le devolví.
Nos quedamos mirándonos a los ojos, acomodo un mechón de pelo detrás de mi oreja y se acerco más a mí, me dio un beso en la frente y al separarnos volvimos a quedarnos muy cerca el uno del otro, a mi cabeza vino la noche anterior, ¿Quería que John me besara? un escalofrió me recorrió el cuerpo de arriba abajo, vi como se acerco un poco más, puso una de sus manos en mi nuca y la otra en mi mejilla, me sonrió levemente y me acerco un poco más a él, instantáneamente cerré mis ojos, sentía su aliento chocar contra mis labios, escuche como suspiró y rozo mis labios con un roce casi invisible sin llegar a besarme.
Mi cabeza era una autentica locura, una parte de mi me decía que me dejara llevar, la otra me repetía una y otra vez que él no era para mí, estaba al borde de un abismo en el que no sabía que camino escoger, ¿Dejarme llevar y probar? O ¿Apartarme y resignarme a estar sin él? Demasiadas dudas que tenían que ser resueltas, deje de notar el roce de sus labios y me asuste, escuche un suspiro y abrí lentamente los ojos, el tenia los ojos cerrados y la cabeza recostada hacia atrás en el sofá.

-John. . . le llame suavemente, el abrió los ojos y me miro, -¿Por qué. . .? me corto.
-¿Estás segura? De verdad Sarah, ¿estás segura de que quieres que lo haga? Pregunto sentándose bien.
-John. . . yo, no me salían las palabras.
-Tú que Sarah, porque creo adivinar que estabas comiéndote la cabeza cuando estaba a punto de hacerlo, ¿o me equivoco?, negué agachando la cabeza.
-Solo dime porque, porque te duele tanto sentir algo por mí, levante la cabeza y le mire.
-No quiero hacerte daño, no quiero hacerlo a mí misma cuando me v. . . y no acabe la frase interrumpida de nuevo por él.
-Cuando te vayas sí, me sé la historia. . . resoplo, y se paso las manos por la cara.
-Lo dices como si te molestara, dije apenas sin mirarle.
-¿Molestarme? Claro que me molesta Sarah, en vez de hablar conmigo te cierras en banda, decides que lo mejor es ignorar lo que sientes por mí, ¿y si yo quiero arriesgarme? ¿Y si las cosas cambian y todo va bien?
-No irán bien John, dije levantándome del sofá, -estas cosas nunca salen bien, no creo en las relaciones a distancia y la que habrá entre nosotros será demasiada, ¡Ni si quiera se cuando volveríamos a vernos! Exclame mirándole, se levanto y vino hacia mí.
-¿Te has ido? Pregunto con los brazos cruzados, le mire confundida, -contéstame, ¿te has ido? Negué lentamente con la cabeza, -bien, aun sigues aquí ¿no? Asentí, -y que problema hay Sarah, aun queda mucho verano por delante, porque no intentarlo y ver qué pasa, quizás nos vaya bien, volví a negar con la cabeza mientras una lagrima recorría mi mejilla.
-Está bien, suspiró, levante la vista y le vi cogiendo su chaqueta y las llaves del coche, ¿se iba a ir? No, otra vez no, -sigue con tus miedos, no soy quien para hacerte cambiar de opinión, si es lo que quieres de acuerdo, se puso la chaqueta, se acerco y deposito un beso en mi cabeza, -me voy, y camino hasta la puerta.

*Eres idiota chica* dijo mi voz interior.
“No estoy para ti ahora, déjame”
*Se va a ir Sarah, haz algo antes de que habrá esa puerta y desaparezca*
“No puedo” otra lagrima resbalo por mi mejilla.
*El te importa, le amas, ¡Actúa!*

Tal vez mi vocecita interior tenía razón, ya había acertado una vez ¿Por qué no otra? Levante la cabeza y le vi abriendo la puerta, suspire ¿Por qué me costaba tanto decirle que no se fuera? quería caminar hacia él y decirle que quería estar con él pero mis pies no se movían, era como si tuviera todo el cuerpo paralizado, salí de mis pensamientos cuando escuche la puerta de la entrada cerrarse, el se había ido.
Saque fuerzas de donde no las tenía, a la mierda todo, me arriesgaría, por el, por mi, por lo que sentía, tal vez el tuviera razón, quizás nos fuese bien, seque mis lagrimas y camine hasta la puerta, la abrí y le vi a punto de subirse al coche.
-¡JOHN! Grite desde la puerta, el se giro y me miro, había dejado de llover pero hacia frio, di un paso al frente y el hizo lo mismo.
-Por favor no te vayas, yo. . . te. . . “te quiero” murmure por lo bajo, le vi hacer un gesto raro y se cruzo de brazos.
-¿Qué? Pregunto apoyándose en su coche, suspire mientras cerraba los ojos, los abrí y ahí estaba el, de brazos cruzados apoyado en su coche mirándome, me acaricie los brazos para calmar un poco el frio, le vi quitarse la chaqueta , dio unos pasos hacia mí y me la puso por encima, levante la cabeza y le mire fijamente a los ojos, me fije que le brillaban y sonreí por dentro, eran los ojos que quería ver todos los días al despertarme y antes de acostarme, cogí una de sus manos y la entrelace con la mía, cogí su otra mano y la lleve a la altura de mis labios depositando un beso en su palma, le mire y con todas mis fuerzas le dije lo que sentía.

-Te quiero, susurre mirándole a los ojos, le vi esbozar una sonrisa y me acerque más a él.
-Repítelo, pidió cogiendo mi cara entre sus manos.
-Te quiero, y me dio un beso en la frente.
-Repítelo.
-Te quiero, y un beso fue a parar a una de mis mejillas.
-Repítelo.
-Te quiero, la otra mejilla.
-Repítelo Sarah, susurro cerca de mis labios.
-Te quiero John. . . susurre pasando mis manos por su cuello y entrelazándolas, le escuche suspirar y acto seguido hizo algo que llevaba tiempo deseando.

Rozo mis labios suavemente para después presionarlos con los suyos, me estremecí y suspire, moví mis labios al mismo ritmo que los suyos, sentí su lengua rozar mi labio inferior y acto seguido le di el permiso que me estaba pidiendo, nuestras lenguas se rozaron y se entrelazaron entre ellas mientras nuestros labios bailaban juntos, mis ojos permanecían cerrados disfrutando de esa sensación, de probar sus labios por fin, notaba que me faltaba el aire pero no quería separarme de John por nada del mundo, sin embargo fue el que bajo el ritmo y fue separándose poco a poco.
-Te quiero Sarah, no te imaginas cuanto, susurro aun rozando mis labios, sonreí y presione mis labios con los suyos en un corto beso.
-Quédate. . . pedí abriendo los ojos para encontrarme con los suyos que brillaban más que antes.
-¿Estás segura? Pregunto apartando un mechón de pelo de mi cara.
-Muy segura, quédate John, pedí de nuevo hundiendo mi cabeza en su pecho.
Y no hizo falta repetírselo, me abrazo y empezó a caminar hacia la puerta guiándome, entramos y él se encargo de cerrar, fui al salón a apagar las luces y al darme la vuelta me choque con él, me cogió de la cintura mientras me sonreía y me dio un pequeño beso en los labios, le devolví la sonrisa y empecé a subir las escaleras hacia mi cuarto seguida por él, abrí la puerta y le hice pasar, nada más entrar se fue directo al oso y le dio un gran abrazo, lo que a mí me hizo reír, dejo al oso en su sitio, se dio la vuelta y rio conmigo, le vi acercarse con esa sonrisa que hacía que me quedara embobada mirándole, cuando reaccione sus labios estaban sobre los míos y mis ojos totalmente cerrados, me abrace a él y le seguí el beso, poco a poco fuimos separándonos, nos miramos a los ojos y me dio un toque en la nariz, reí ante eso.

-Voy a por algo de ropa para que estés más cómodo, ahora vuelvo, el asintió y yo me dirigí a la habitación de mi hermano, abrí el armario, saque un pantalón de deporte y una camiseta y volví a mi habitación.
-Aquí tienes, es de Leem, dije dándoselo, se dio la vuelta mientras se quitaba la camiseta y no pude evitar tragar saliva y bajar la cabeza, escuche su risa, le di la ropa y acto seguido me metí al baño a cepillarme el pelo.
Cuando salí le vi poniendo mantas en el suelo, me apoye en el marco de la puerta observándole, él ni siquiera se había dado cuenta de que estaba ahí, me acerque sigilosa a él y le abrace por detrás.
-¿Qué haces? Pregunte apoyando mi cabeza en su espalda.
-A ti que te parece, dijo mientras se daba la vuelta y me abrazaba.
-¿De verdad crees que dejaría que durmieras en el suelo? Y una pequeña risa se escapo de mis labios.
-¿Estas sugiriendo que duerma contigo? Se separo un poco de mi cogiéndome por los hombros y me miro levantando una ceja.
-Pues claro, o ¿tengo que preocuparme de que vayas a violarme? Dije soltando una carcajada.
-Violarte no, pero que no te sorprenda que quiera hacerte el amor, dijo como si nada mientras me miraba pícaro, mis mejillas en seguida se tiñeron de rojo y mis ojos se abrieron más de la cuenta, el en seguida soltó una carcajada mientras que yo le miraba confusa.
-Sarah tranquila, no hare nada que tú no quieras ¿de acuerdo? Solo bromeaba, dijo acariciando mis mejillas y dándome un beso en la frente, suspire tranquila y un pequeño bostezo se escapo de mi boca.
-Es tarde, vamos a dormir enana, asentí y camine hasta la cama, aparte las mantas y la sabana y me metí dentro, el cerro la puerta de la habitación y vino junto a mí, apago la luz y se metió en mi cama, se removió un poco y me abrazo, yo puse mi cabeza en su pecho y sentí su mano en mi cintura.

Un escalofrió me recorrió el cuerpo, tenía que procesar la información, estaba en mi casa, en mi cama, con John, al que le había dicho que le quería, al que había besado. . . y ahora la pregunta es ¿Qué somos? Iba a preguntarle cuando su voz me sorprendió.
-¿Sarah? Me llamo entre susurros.
-¿Humm? Estaba a punto de quedarme dormida, acaricie su pecho para hacerle saber que aun estaba despierta.
-Te quiero. . . y quiero saber si esto quiere decir que nos damos una oportunidad de estar juntos, dijo directamente en mi oído, me estremecí por el tono de su voz.
-John te quiero, y sí, quiero intentarlo, quiero ser solo tuya, susurre también en su oído.
-Eres mía pequeña, buenas noches y me dio un pequeño beso en los labios.
-Buenas noches, susurre entre bostezos.
Me acerque un poco más a él y hundí mi cara en el hueco de su cuello, mi mano descansaba en su pecho, su corazón latía rápido, casi tanto como el mío, me concentre en el subir y bajar de su pecho cuando respiraba, y así, entre sus brazos me fui quedando dormida sabiendo que cuando me despertara lo primero que vería seria a él, al chico del que estaba completamente enamorada, a John, mi John, mi chico, mi novio, mi OJOS VERDES.

[. . .]



[Por fin después de todo ella deja atrás sus miedos, decide arriesgarse y tras decirse ambos que se quieren sellan ese sentimiento con su primer beso, mientras el esta dichoso por poder tener al fin a la chica entre sus brazos, por fin ha podido probar sus labios y lo más importante, ambos empiezan una aventura juntos, lo que él no sabe es que quizás las cosas no vayan tan bien y ella en el fondo tuviera algo de razón. . .]





domingo, 18 de noviembre de 2012

Capitulo 29

Holaaaaaa mis pequeños y adorables duendecillos!!! Pues nada aquí una semana mas con un nuevo capi, os digo que a partir de este creo que os van a gustar mas ;)
Estoy añadiendo muchas cosas nuevas, entre ellas personajes y digamos que alguna escena :p
Espero que disfrutéis de este capi, y que reciba muchos comentarios jejeje
Sois los mejores, me encanta leer vuestras reacciones...
ESPERO QUE NO QUERÁIS TIRARME DE LOS PELOS POR COMO LO DEJO JAJAJAJAJA
Y nada sin mas que añadir, a leer cuquimonerias!
Lost Of Love!!





NARRA JOHN

Termine de colgar el teléfono y escuche las voces de las chicas en el jardín, sonreí escuchándolas hablar pero entonces algo me llamo la atención, mi nombre, me acerque a la puerta del jardín y sin quererlo me quede escuchando, estaba claro que hablaban de mi y no podía creer lo que mis oídos acababan de escuchar, ella. . . ella sentía lo mismo por mí, acababa de decirle a Mel que estaba enamorada de mi, una sonrisa se formo en mis labios pero se esfumo segundos después cuando escuche que ella no quería sentirlo, me sentía tan idiota, agache la cabeza y suspire, escuche como decía algo de irse y que por eso no quería nada conmigo, a medida de sus palabras me enfurecía mas, no lo aguante y entre de nuevo en casa, subí las escaleras, entre en mi cuarto y cerré dando un portazo.
-¡¡¡MIERDA!!! Grite con rabia, ¡¡¡MIERDA, MIERDA, MIERDA!!! Tire varias de mis cosas y le di golpes al armario, me sentía como un completo imbécil.
Edward abrió la puerta y en seguida vino a donde mí, me cogió las manos pare que dejara de dar golpes pero me solté de su agarre y volví a golpear el armario con fuerza.
-¡¡¡JODER!!! Grite dejándome caer sobre la cama, mi hermano se acerco a mí y me agarro las manos.
Estuvimos hablando un buen rato, aunque yo más bien a cada palabra me alteraba mas, mi hermano trataba de tranquilizarme pero yo sentía la rabia en mi interior, rabia por saber que la chica de la que estaba enamorado sentí lo mismo pero lo rechazaba, no pude mas y abrace a mi hermano dejando salir toda esa rabia en forma de mil lagrimas, me sentía tan mal, tan débil en esos momentos.
Me separe de Edward y me fije en que las chicas estaban paradas en la puerta de nuestro cuarto, Sarah no dejaba de mirarme, vi que tenía varias lagrimas corriendo por su rostro pero todo lo que sentí fue más rabia aun, le grite, si le grite como nunca lo había hecho con nadie, ni si quiera con Natalie el día que me dijo que me dejaba por otro chico porque yo no valía nada, ese día simplemente me quede ahí parado viendo como ella se iba, desde entonces no me he permitido enamorarme de nadie, hasta que llego ella. . . Sarah. . .
Vi como ella susurraba mi nombre e intentaba acercarse a mí, retrocedí antes su gesto y le grite más aun, le dije que se fuera que no quería verla, que la olvidaría y que olvidaría todo lo que sentía por ella, ella me miro con los ojos muy abiertos, yo le aparte la mirada, escuche como rompió en llanto y tras bajar las escaleras un portazo, se había ido, y todo porque yo se lo dije, en ese momento Melanie se acerco a mí y sin decir una sola palabra me cruzo la cara de una bofetada.

-Eres lo peor John, ¿Cómo se te ocurre hablarle así? Me lleve la mano a la mejilla, -ella estaba dispuesta a decírtelo todo, estaba dispuesta a dejar el rechazo atrás, me dijo con rabia.
-Yo. . . intente hablar pero me interrumpió.
-Tu nada John, mas te vale que ella no haga ninguna tontería porque te juro que no te lo perdonare y acto seguido salió de nuestro cuarto y otro portazo se escucho de nuevo.
Me quede quieto en medio de la habitación, no sabía cómo reaccionar a lo que ella acababa de decirme, ¿Seria verdad que Sarah iba a contármelo y que dejaría sus miedos atrás? En ese momento me sentí lo peor por haberle hablado así, susurre un “Mierda”, me lleve las manos a la cara y me deje caer en el suelo de rodillas, en seguida note los brazos de mi hermano rodearme fuertemente.
-He sido un idiota, repetía una y otra vez, mientras volvía a llorar, me había portado tan mal con ella, ni siquiera la había dejado hablar.
-Tranquilo John, todo se arreglara, me decía Edward para intentar calmarme, y yo interiormente deseaba poder tener esa oportunidad de arreglar las cosas.

Le pedí a mi hermano que me dejara solo, necesitaba pensar, aclarar las cosas en mi cabeza, tras asentir salió de nuestro cuarto, no sabía qué hacer, la cabeza me iba a estallar en cualquier momento, decidí darme una ducha, me metí debajo del agua y deje que las gotas mojaran mi cuerpo, cerré los ojos y al momento ella vino a mi cabeza, sus labios, sus ojos, toda ella ocupaba mi mente ahora, después de unos minutos me sentí algo mejor y decidí salir, me vestí y seque un poco mi pelo, mire la hora en mi móvil y vi que había estado más de dos horas en la ducha.
No tenía ganas de comer pero aun así baje abajo, mi hermano estaba en el salón viendo la tele, me senté a su lado, el me miro y la apago.
-¿Quieres un trozo de pizza? Llego hace una hora, yo simplemente negué.
Nos pasamos la tarde en el sofá viendo la televisión sin decir nada, mi hermano intento varias veces sacarme tema de conversación pero yo simplemente me limitaba a mirar hacia la televisión y no contestar, así estuvimos hasta entrada la noche, me levante y fui a la cocina a comer algo, estaba acabándome un trozo de pizza cuando vi a mi hermano entrar en la cocina, estaba como pálido y su rostro mostraba preocupación.
-John. . . susurro.
-¿Qué pasa? Dije acercándome un poco a él.
-Mel acaba de llamarme, dice que ha estado toda la tarde llamando a Sarah y que no se lo ha cogido, le ha mandado un mensaje y nada, estaba muy preocupada.
Me quede ahí parado mirándole, la preocupación empezó a inundarme, no me perdonaría que nada le pasara.
-Llámala tú Edward, el saco su teléfono y marco su número, nada no lo cogía, volvió a marcar y ahí fue cuando le vi mirarme con ¿miedo?
-¿Qué? Pregunte tan rápido como pude.
-No lo coge John, he vuelto a marcar y me da apagado, no, no podía ser, -Vuelve a intentarlo le dije dándole el teléfono, volvió a marcar el numero y espero, colgó, me miro y negó suavemente.

Me lleve las manos a la cabeza, no podía ser, dios no, esto no podía estar pasando, pero ¿y si ya había vuelto a casa? Si tenía que ser eso, le dije a mi hermano que llamara a Mel y le preguntara, después de unos minutos hablando me dijo que había pasado por su casa, que todo estaba apagado y que había llamado varias veces al timbre y nadie había contestado.
Empecé a ponerme nervioso, mire el reloj, eran casi las dos de la madrugada, no podía pensar que ella aun siguiera por ahí, sola, me asome a la ventana y vi que comenzaba a llover, no lo soportaba mas, salí al salón y cogí la chaqueta y las llaves del coche.
-¿A dónde vas? Pregunto Ed cuando me vio abrir la puerta de la entrada.
-A buscarla, no me perdonare si le pasa algo, por favor Edward si tienes noticias de ella llámame, el asintió y salí de casa cerrando la puerta.

Me subí al coche y arranque, empecé a dar vueltas por las calles de Dublín pensando donde podría estar, iba pasando calles y calles y no la veía por ningún lado, los nervios cada vez eran mayores, ¡Concéntrate John! Me dije a mi mismo, piensa vamos ¿Dónde podría haber ido? Cerré los ojos y empecé a pensar en ella, ¡El Parque! Si, sin duda seguro que habría ido ahí, le encantaba ese sitio, nuestro sitio, conduje lo más rápido que pude hacia allí, justo cuando iba a girar para aparcar la vi, caminando, estaba empapada, no tenia chaqueta ni tampoco paraguas, aparque como pude y me baje del coche, la vi cruzar la calle sin mirar, en ese instante vi un coche que se dirigía a toda velocidad hacia ella, corrí todo lo que pude y antes de que el coche la alcanzara la cogí fuerte del brazo y la aparte hacia atrás, el coche paso, había faltado tan poco para que la hubiera atropellado.
Sentí como me agarraba fuertemente, estaba seguro de que ni si quiera sabía que era yo, como pude me quite la chaqueta y se la puse por encima, ella se separo y levanto la vista con miedo, me miro y su rostro se ilumino cuando me vio, yo simplemente la miraba, ella volvió a hundirse en mi pecho y yo la abrace con fuerza mientras acariciaba su pelo.
-Vamos a casa, susurre apenas con un hilo de voz.
Ella asintió y aun abrazada a mí y yo a ella caminamos hasta mi coche, le abrí la puerta y la ayude a subirse, rodee el coche y me subí, me puse el cinturón y arranque dirección a su casa, puse la calefacción, estaba empapada y algo de calor no le vendría mal, cuando llegamos me baje y la ayude a ella a bajarse, le pedí que me diera sus llaves, rebusco en el bolso y me las dio, pase un brazo por encima de sus hombros y caminamos hasta la puerta, abrí y los dos pasamos dentro, cerré la puerta y me gire hacia ella.
-Ve a ducharte mientras te preparo algo caliente ¿de acuerdo? Dije frotando sus brazos.
-Vale. . . contesto con un hilo de voz apenas audible, esboce una diminuta sonrisa y entre en la cocina a prepararle algo caliente.

Hice un poco de chocolate, le vendría bien para entrar en calor, de paso me prepare uno para mi, escuche sus pasos por las escaleras y supuse que habría ido al salón, cogí ambas tazas y salí, entre en el salón y ella estaba sentada en el sofá con las piernas subidas, le di una de las tazas y yo me senté a un lado del sofá con la mía, le dio un sorbo a su chocolate y dejo la taza a un lado, vi como temblaba levemente, deje mi taza sobre la mesa y me levante para coger una manta y se la eche por encima, iba a sentarme de nuevo cuando sentí como me cogía la mano y hacia que me sentara a su lado, la mire algo confundido, se removió por el sofá y se acerco a mí, puso su cabeza en mi pecho y me abrazo, cogí la manta y nos tape con ella, acto seguido la envolví con mis brazos mientras le acariciaba el pelo suavemente.
-Perdóname por favor, susurro con la voz entrecortada, podría jurar que sus ojos estaban humedecidos por las lágrimas.
No dije nada, me quede callado, ella no podía pedirme perdón cuando yo había sido el imbécil, yo la había tratado mal, me sentí el peor tío del mundo, cerré los ojos y al abrirlos varias lagrimas resbalaban por mis mejillas muriendo en mis labios, un suspiro salió de mi boca, note como ella se enderezaba y me miraba, con sus manos quito las lagrimas de mi cara, cerré los ojos y bese la palma de su mano, ella escondió la cara en el hueco de mi cuello, le rodee la nuca con las manos y le di un ligero beso en la comisura de sus labios.
-Perdóname tú a mi Sarah, lo siento mucho pequeña, de verdad, dije en su oído, se aferro más a mí y beso mi cuello haciendo que me estremeciera.
Me separe un poco de ella para mirarla a los ojos, los tenia brillantes y ligeramente cristalinos a causa de las lagrimas, acaricie su mejilla con el dorso de mi mano, vi como cerraba los ojos y suspiraba.
-John. . . susurro, pero antes de que siguiera hablando la corte.
-Shh, no digas nada Sarah, perdóname por comportarme como un idiota, lo siento, no debería haberte hablado así, por favor preciosa perdóname, y una lagrima cayo de mis ojos.
-Te perdono John, dijo con un hilo de voz, levanto su mano y seco la lagrima que corría por mi rostro, le dedique una pequeña sonrisa que ella me devolvió.

Nos quedamos mirándonos a los ojos, acomode un mechón de pelo detrás de su oreja y me acerque más ella, le di un beso en la frente y al separarme volvimos a quedarnos muy cerca el uno del otro, recordé la noche anterior y otra vez mi cabeza me decía que la besara, ansiaba poder probar sus labios de una vez, un escalofrió me recorrió el cuerpo de arriba abajo, me acerque un poco más, puse una de mis manos en su nuca y la otra en su mejilla, le sonreí levemente y la acerque un poco más a mí, ella cerró los ojos al igual que yo, sentía su aliento chocar contra mis labios, suspire y roce sus labios con un roce casi invisible sin llegar a besarla.


[El le pidió perdón una vez mas y ella le perdono, ambos estaban a punto de dar ese gran paso, ¿lo harán? ¿El la besara esta vez? ¿Dejara ella atrás sus miedos por él?]






domingo, 11 de noviembre de 2012

Capitulo 28

Hola mis amores!!! Pues nada aquí vengo una semana mas con un nuevo capi!!!
Vale principalmente he estado pensando seriamente en la nove, NO voy a dejarla para los que preguntéis  simplemente he estado pensando en como acabar, no se si hacer 2ª temporada o seguirla y hacer un epilogo final, a mi personalmente me gusta mas el epilogo ¿Que pensáis vosotros?
Y no os preocupéis aun quedan muchos capis ;) aunque debo admitir que llevo mas de 1 semana sin escribir.... lo siento el capitulo 32 se me resiste ¬¬
En fin, veo que algunos en el capi anterior os sorprendisteis, bien! eso me gusta, y os adelanto que en este os vais a sorprender mas aun..
¿Que creéis que pasara con John y Sarah? ¿Se olvidara el de ella? ¿Creéis que llegaran a estar juntos?
Os invito a que lo descubráis en "TODO LO QUE NECESITO ES TU MIRADA" ;)
Un beso mis pequeños y adorables duendecillos! Lost of Love!



NARRA SARAH

Mel y yo seguíamos sentadas en el jardín de los chicos hablando, al fin le había confesado lo que realmente sentía pero en realidad aun me quedaba el paso más grande, decírselo a John, ¿Cómo reaccionaría cuando le dijera que me gusta? Alomejor el no sentía lo mismo y yo quedaría como una verdadera estúpida.
-Entonces que Sarah, ¿te animas? Me pregunto mi amiga con una mirada cómplice.
-La verdad no lo sé Mel, ¿y si él no siente lo mismo? Quedare como una idiota, dije agachando la cabeza.
-Sarah en la vida hay que arriesgar, además mi abuela siempre me decía que si no lo intentamos nunca sabremos que pasara.
-¿Te pareces mucho a ella no? Dije con cierto tono de ironía.
-Puede, pero en serio amiga esta vida es demasiado corta como para desperdiciarla, lánzate y que sea lo que dios quiera, además en caso de que el no sintiera lo mismo siempre podéis ser amigos ¿no?
-Supongo que tienes razón, suspire, -¿se lo digo no? Dije mirándola, ella asintió con una sonrisa y levantando las cejas, -en fin te hare caso pero como salga mal serás la única culpable, dije apuntándola con el dedo.
-Sin problema, contesto poniendo la mano a modo de juramento, le di un golpe en el hombro y ambas nos echamos a reír.

Decidimos entrar ya, tal vez los chicos necesitaran ayuda, nos levantamos y nos dirigimos al salón, justo cuando Mel entraba detrás de mi escuchamos un portazo, las dos saltamos en el sitio mirándonos, Edward apareció de la cocina y nos miro, solo había podido ser una persona, “John” susurre, Ed nos dijo que esperáramos aquí y desapareció escaleras arriba.
Me quede quieta en el sitio, mirando hacia las escaleras pensando que habría pasado, mi cuerpo temblaba a medida que pasaban los segundos, note los brazos de Mel abrazarme de lado diciéndome que estuviera tranquila, la mire y esboce una media sonrisa de lado cuando entonces las voces de John me sorprendieron.
Sin pensármelo dos veces comencé a subir las escaleras, Mel iba detrás de mí, nos quedamos en la puerta escuchando lo que hablaban, no podía creer lo que estaba escuchando, a medida de sus palabras mis ojos se humedecieron y las lágrimas resbalaron por mis mejillas.
¿El sentía algo por mi? No, no podía ser cierto, vi como se abrazaba a su hermano llorando, jamás le había visto llorar y eso me destrozo por dentro, un nudo se formo en mi estomago y sentí que me faltaba el aire, el. . . el era fuerte y sin embargo la imagen que tenia ahora delante de mí era la de un John débil, hundido, y todo por mi culpa, por mis estúpidos miedos.
Se separo un poco de Edward y miro hacia donde estábamos nosotras, sus ojos se abrieron en asombro, Ed se giro y nos vio, su cara era de total confusión, le hizo un gesto a Mel para que fuera con él, ella corrió a sus brazos y el la abrazo fuertemente, yo me quede en el sitio tratando de asimilar todo lo que había escuchado, mirándole, ambos nos estábamos mirando.

-¡Que miras! me espeto así sin más, me quede confundida por su tono de voz y las lagrimas volvieron a mis ojos.
-Lo has escuchado ¿verdad? Me pregunto él, aunque más bien me escupió la pregunta, yo asentí débilmente con la cabeza.
-Pues entonces ya sabes lo que pienso al respecto, intente acercarme al él pero le vi retroceder lo que me dejo mas confundida aun.
-No, no te acerques, no me toques Sarah, no me hables, solo desparece de mi vista, are de cuenta que nunca sentí nada por ti, te olvidare, olvidare todo sentimiento que tenga que ver contigo, note la furia en su voz, en sus palabras, me fije en como apretaba los puños.
Abrí la boca sorprendida por sus palabras, estaba en estado de shock, ese no podía ser John, en ese momento era una persona completamente desconocida para mí, no podía creer que esto estuviera pasando, no después de lo de anoche.
-John. . . susurre, no había dicho nada desde que subí, volví a acercarme a él y el volvió a retroceder.
-¿Estas sorda? ¡No me hables! Olvídate de mi Sarah porque créeme que yo lo haré contigo, vete, me quede parada en medio de la habitación, -¡¡¡Que te vayas!!! Me grito más alto esta vez.
Salte en el sitio sorprendida, le mire con lagrimas en los ojos, él me aparto la mirada y en ese momento no pude mas, rompí en llanto y me gire para irme escaleras abajo, cogí mis cosas y salí de su casa dando un portazo.

Las lagrimas brotaban de mis ojos sin parar y la verdad no tenía intención de detenerlas, eso era lo que quería en ese momento llorar, llorar hasta que no pudiera mas, corrí sin rumbo por las calles de Dublín, la gente me miraba al pasar pero me daba igual, me sentía horriblemente mal, lo único que quería era desaparecer, cerrar los ojos y que al abrirlos nada de esto hubiera pasado, que todo estuviera bien como antes; sus palabras resonaban en mi cabeza, no podía ser cierto, esto no me podía estar pasando a mí, no podía creer como todo se había ido a la mierda, yo iba a explicárselo, iba a decírselo. . . el sentía lo mismo por mí, ahora entendía porque Mel me había dicho que yo no le era indiferente, pero de nada valía ya, si tenía alguna oportunidad de tener algo con John se acababa de ir todo a la mierda, el no quería verme, no quería que le hablara, solo me había dicho que despareciera de su vista, que se olvidaría de mi. . .
Estaba cansada de correr, me dolían los ojos de tanto llorar, me pare en seco y mire donde estaba, el parque, me acerque a nuestro sitio donde siempre íbamos, tenía su imagen grabada en mi mente, me senté y rodee mis piernas con los brazos, imágenes de la noche anterior acudían a mi cabeza, sus ojos, su sonrisa, la manera en la que me hablaba para calmarme, no pude evitarlo y volví a romper en llanto escondiendo la cabeza entre mis piernas, “John” susurre entre lagrimas, le había perdido, todo se había acabado, en ese instante mi móvil sonó, lo cogí para mirar y vi que era Mel quien me llamaba pero ahora solo quería estar sola, colgó y escasos segundos después volvió a llamar y así una y otra vez hasta que recibí un mensaje.

Sarah te he buscado por todas partes, ¿Dónde estás? Por favor amiga cógeme el teléfono, necesito saber como estas”

No quería que se preocupara por mí, esto era asunto mío y la verdad es que no quería estar con nadie ahora mismo, solo quería desaparecer, alejarme de todo esto y tenía una ligera idea de cómo hacerlo, el móvil volvió a vibrar y otra vez el nombre de Mel alumbraba en la pantalla, deje que sonara una y otra vez, así hasta más de 10 veces hasta que por fin dejo de hacerlo.

[. . .]

No sabía cuántas horas llevaba ahí sentada pero estaba empezando a anochecer, mi estomago rugió del hambre pero la verdad es que no tenía ganas de nada, veía a la gente pasar en ambas direcciones pero ellos no parecían percatarse de mi presencia, vi a una pareja que pasaba justo por mi lado, cogidos de la mano, sonriendo, no pude evitar que alguna que otra lagrima brotara de mis ojos, me acordaba de él, del chico al que por estúpida había perdido hace unas horas, y llore, llore hasta que me quede sin lagrimas que derramar.
Mi móvil volvió a sonar de nuevo, mire y esta vez era Edward el que llamaba, deje que sonara una y otra vez, en cuanto colgó rápidamente apague el móvil, no quería estar con nadie y Edward ahora mismo me recordaba demasiado a él, volví a abrazar mis rodillas contra mi pecho pensando en el, en todos esos momentos que había pasado con él. . . Empecé a tener algo de frio, ya no había gente por la calle, me levante y mire el reloj del parque, marcaba las 2 de la madrugada, sin duda había estado demasiadas horas ahí sentada, empecé a caminar en dirección a mi casa con la mala suerte de que comenzaba a llover, no tenia paraguas y tampoco chaqueta, deje que el agua calara mi ropa e incluso mis huesos, me quedaba bastante camino aun, estaba cruzando la calle cuando de repente sentí como unos brazos me agarraban y un coche pasaba a toda velocidad justo en ese momento, me aferre al cuerpo que tenia a mi lado sin ni siquiera mirar quien era, aunque en ese momento me daba igual, me acababa de salvar la vida porque estaba segura de que ese coche me hubiera atropellado.
Estaba temblando, asustada, tenía ganas de llorar y eso hice, me aferre a la persona que me estaba abrazando y deje que mis lagrimas salieran, note como me ponía algo encima, abrí los ojos y me fije que era una chaqueta, ¡un momento! Yo conocía esa chaqueta, me separe poco a poco de esa persona y con miedo levante la vista, no podía creer lo que mis ojos estaban viendo, parpadee un par de veces pensando que solo era una ilusión pero no, el estaba ahí, delante mía, mirándome, no lo dude ni un segundo y me aferre a él con fuerza, note como me abrazo más fuerte y me acariciaba la cabeza, me sentía tan protegida entre sus brazos.

-Vamos a casa, susurro apenas con un hilo de voz.

 Asentí aun abrazada a él y comenzamos a caminar hasta que llegamos a su coche, me abrió la puerta y me ayudo a subirme, me puse el cinturón, el se subió, se puso el cinturón y arranco, íbamos en silencio, vi como ponía la calefacción y sonreí ante ese gesto, la verdad es que estaba empapada y helada, apoye mi cabeza contra el cristal durante el trayecto.
Llegamos a mi casa y el aparco, se bajo y acto seguido me abrió la puerta ayudándome a bajar, me pidió las llaves, rebusque en el bolso y se las di, me paso un brazo por los hombros y caminamos hasta la puerta, abrió y pasamos, cerró la puerta y encendió las luces, no había nadie, eso solo significaba que Leem aun no había vuelto.
-Ve a ducharte mientras te preparo algo caliente ¿de acuerdo? Dijo frotando mis brazos.
-Vale. . . dije con un hilo de voz apenas audible, vi como esbozaba algo parecido a una sonrisa y se metió en la cocina.
Subí las escaleras y entre a mi cuarto, cogí ropa interior seca, el pijama y me fui al baño, deje el agua correr mientras me quitaba la ropa mojada y la echaba a lavar, cuando estuvo lista me metí en la ducha y me relaje, varios minutos después salí, me seque y me puse el pijama, fui a mi cuarto y me seque un poco el pelo dejándolo suelto y me lo cepille, Salí de la habitación y baje abajo.
Entre en el salón y me senté en el sofá encogiendo mis piernas hacia arriba, en ese instante apareció el con dos tazas en la mano, me dio una y el se sentó a mi lado con la otra, di un sorbo a mi chocolate caliente, hecho por el sabia incluso mejor, deje la taza a un lado y un escalofrió recorrió mi cuerpo, le vi dejar su taza y levantarse, cogió una manta y me la hecho por encima pero antes de que se sentara agarre su mano y le hice sentarse a mi lado, me miro con algo de confusión, me moví y me acerque a él, puse mi cabeza en su pecho y le abrace fuertemente, sentí como cogía la manta y nos tapaba con ella, acto seguido me envolvió en sus brazos mientras me acariciaba el pelo suavemente.

-Perdóname por favor, susurre con la voz entrecortada, notaba como las lagrimas humedecían mis ojos.
El no decía nada, empezaba a pensar que en cuanto estuviera tranquila se iría, le escuche suspirar y levante un poco la vista, varias lagrimas resbalaban por sus mejillas, me enderece y se las quite con mi mano, cerró los ojos y me dio un beso en la palma de la mano, escondí mi cara en el hueco de su cuello, sentí sus manos rodear mi nuca y acto seguido un pequeño beso en la comisura de mis labios.

-Perdóname tú a mi Sarah, lo siento mucho pequeña, de verdad, dijo en mi oído, me aferre más a él y bese su cuello suavemente haciendo que se estremeciera.



[Y así el la salvo, a pesar de sus palabras ella era muy importante y ambos, sentados en ese sofá se habían pedido perdón entre lagrimas. . . protegida, así es como ella se sentía al lado del chico al que amaba]







domingo, 4 de noviembre de 2012

Capitulo 27

Hola hola!!! Que ¿Que tal estáis duendecillos? Espero que super bien :)
Lo primero de todo es, daros las gracias a todos los que me comentasteis la nove, me han encantado vuestros comens, me guste que os volquéis tanto con la novela.
Algunos de vosotros ;) ya sabéis un adelanto de lo que ocurrirá en próximos capis jejeje
Y bueno nada deciros que os hecho mucho de menos amores, que aunque a veces estoy con el móvil estoy todo el día fuera de casa y muchas veces no puedo ni mirar el móvil 5 segundos, es una mierda estar absorbida tantas horas :(
Pero bueno ya queda menos y cuando menos os lo esperéis me tendréis de nuevo dando por saco jajajajaajaj
Vale vale, ya no me enrollo mas os dejo con este capi que se que a mas de uno/a os va a sorprender, solo os pido ¡ Por favor no me matéis! jajajajaja
Os amo mucho mis pequeños y adorables duendecillos! Lost Of Love!!




NARRA EDWARD


Dormir con Mel había sido increíble, tenerla entre mis brazos toda la noche y poder despertarme a su lado y que lo primero que viera fuera ella, sin duda estaba enamorado de ella. Después de levantarnos nos ofrecimos a ir a por el desayuno, desayunamos todos juntos entre risas, bromas y claramente carantoñas por mi parte y de mi chica, hubo un momento en el que sentí un golpe en la pierna, mire hacia Mel que me hizo un gesto con la cabeza en dirección a mi hermano y Sarah, mire y los dos se estaban mirando a los ojos, sonriendo, me fije que tenían las manos entrelazadas y no pude evitar sonreír de oreja a oreja, definitivamente ellos tenían que acabar juntos.
Terminamos de desayunar y lo recogimos todo, les ofrecimos pasar el día en nuestra casa y ellas aceptaron encantadas, salimos y Mel le dijo a mi hermano de pasar antes por su casa para cambiarse a lo que el acepto sin problema.

Tras salir de casa de mi novia nos dirigimos a la nuestra, en cuanto llegamos mi hermano aparco y nos bajamos del coche, abrió y los cuatro entramos en casa, les dije que iría a enseñarle la casa a Mel y contestaron con un “Vale”, cogí su mano y la guie conmigo al piso de arriba, le enseñe la habitación de mis padres, la de mi hermano mayor, le dije que vivía en Alemania porque estudiaba arquitectura y después pasamos a la mía y de mi hermano.
-¿Compartís habitación? Dijo con una sonrisa en sus labios.
-Eh menos cachondeo señorita, conteste levantando una ceja.
-Idiota, dijo acercándose a mí, -me parece genial, se nota que estáis muy unidos.
Sonreí como un idiota y la deje que inspeccionara el resto de la habitación, miro nuestras camas, le dije que la mía era la que estaba junto la ventana, miro todos nuestros CD’s y luego se paro observando el tablón que teníamos lleno de fotos, vi que miraba una con mucho detenimiento, me acerque a ella y vi que era una foto mía y de John con Kevin.
-Ese es Kevin, dije rodeándola por la cintura.
Sonrió y paso a la siguiente foto, yo la solté y me quede mirándola, ¡Dios mío! Era tan preciosa y era mía, solo mía y de nadie más, la escuche reírse y me fije en la foto que había cogido, ¡Oh no! Pero antes de poder cogerla ella corrió escaleras abajo, yo la seguí.
-¡Melanie devuélveme esa foto! Grite mientras la perseguía, entro corriendo al salón y vi como le daba la foto a Sarah, conseguí cogerla y ambos caímos al suelo envueltos en carcajadas.
Empecé a hacerle cosquillas, la escuchaba suplicarme que parara pero no iba a hacerlo, eso le pasaba por no hacerme caso, mientras ella seguía pataleando en mis brazos me fije que mi hermano aparecía por el salón, le lance una mirada, el miro en dirección a Sarah y lo entendió, abrió los ojos como platos y se abalanzo sobre ella para arrebatarle la foto pero ella fue más rápida y escapo a tiempo.

La verdad era gracioso ver a Sarah corriendo por todo el salón con mi hermano detrás rogándole que le devolviera la foto, John le grito un “Que no te escapes” cuando ella paso por su lado y el no pudo cogerla, escuche a mi novia reírse y volví a concentrarme en ella.
Después de un rato la fui soltando, nos sentamos apoyando la espalda en el sofá y miramos como mi hermano conseguía cazar a Sarah por un despiste de ella, intento quitarle la foto cosa que no consiguió así que la ataco donde más débil era, las cosquillas, en un acto reflejo ella le devolvió la foto y el la soltó, ambos se sentaron en la misma postura que nosotros mientras volvíamos a la normalidad.
Nos quedamos un rato riéndonos de la foto hasta que dije que era hora de comer, los cuatros nos miramos y acto seguido miramos hacia el teléfono, John se levanto y solo pronuncio la palabra “Pizza”, mientras él la encargaba me levante y fui hacia la cocina a poner la mesa.
Terminaba de poner la mesa cuando sentí un portazo que me hizo sobresaltarme en el sitio, salí de la cocina y vi a Mel y a Sarah paradas en medio del salón, el portazo había venido de la parte de arriba, “John” susurre, les dije a las chicas que esperara ahí y subí corriendo las escaleras, abrí la puerta de nuestro cuarto y entre, John estaba pegándole golpes al armario, varias de sus cosas estaban tiradas por el suelo, me acerque a él y le cogí las manos para que estuviera quieto.

-Eh eh John para, ¿Qué ha pasado? Le dije mientras le agarraba, el se soltó de mi agarre y volvió a golpear con fuerza el armario.
-¡¡¡JODER!!! Grito dejándose caer sobre la cama, yo me acerque a su altura y le agarre las manos de nuevo.
-Esto es una mierda Ed, todo es una mierda, dijo con la cabeza agachada mirando al suelo.
-John no te entiendo, por favor cuéntame que ha pasado, dije sentándome a su lado.
-Dime porque cojones tuve que fijarme en ella Edward, dímelo por que no lo entiendo, suspiro y se pasó las manos por la cara.
-Espera, ¿esto es por Sarah? Pregunte algo confundido, hace unos minutos estaban tan bien.
-Yo. . . yo las he escuchado hablar, estaba colgando el teléfono cuando oí sus voces en el jardín, lo escuche todo Edward, ellas hablaban de mi.
Me quede callado mirando a mi hermano, si estaba mal que hubiera escuchado lo que hablaban pero a veces escuchamos cosas sin querer, y estaba claro que él no lo había hecho a posta, pero algo de lo que ellas hablaron fue lo que hizo que él se pusiera así.
-Edward, me llamo mi hermano haciéndome salir de mis pensamientos, levante la vista y me encontré con la suya, -ella. . . ella siente algo por mí, levante una ceja y le mire con una sonrisa, -ella le ha dicho a Mel que está enamorada de mi, sonreí ¡Dios lo sabia! Sabía que ella sentía algo por él, la felicidad me recorrió por completo, pero entonces ¿Por qué mi hermano no estaba feliz?
-¿Y porque has reaccionado así? No lo entiendo John, ella siente lo mismo que tu.
-Escuche como le decía a Melanie que ella no quería sentir nada por mí, le mire aun mas confundido, -ella rechaza lo que siente por mi Edward.
-Pe. . . ¿Por qué? Pregunte mientras me levantaba.
-Dice que ella no podrá ser tan feliz como tú y Mel, que ella se va a ir, por eso no quiere sentir nada por mí, dijo con la voz algo quebrada, -no solo es que tenga que volver a su casa, le han ofrecido una beca para una academia de baile.
-Eso está bien ¿no?, intente sonreírle pero el volvió a agachar la cabeza.
-Es en Italia, son dos años, susurro, levanto la vista y vi que tenía los ojos ligeramente humedecidos, -de nada me sirve hablar con ella, y una primera lágrima broto de sus ojos.
-Tienes que decírselo John, tenéis que hablarlo, dije acercándome más a el, el negó con la cabeza.
-¿Para qué? ¿Para qué me diga que no quiere tener nada conmigo porque va a irse? No Edward.
-Pero John ella tiene derecho a saberlo, tal vez si se lo dices, no me dejo continuar ya que me interrumpió.
-¡NO! No pienso decirle ni una sola palabra Edward, se acabo, todo esto se acabo, me olvidare de ella, olvidare todo lo que siento por ella, dijo elevando un poco el tono de voz.
-John. . . susurre, no podía creer lo que estaba escuchando.
-¡Ni John ni nada! ¡Se acabo! ¡He sido un idiota por fijarme en ella!, y yo que pensaba decírselo todo, decirle que estoy loco por ella, que cada vez que la tengo cerca me muero por besarla, pero ya no, no pienso decirle ni una sola palabra, no lo merece, dijo apretando los puños y con la voz furiosa.
-¿Quieres dejar de gritar? Dije más alto esta vez, -ella puede oírte.
-¡Que me oiga, me da igual! Ya me da igual todo Edward, dijo dejando que sus lagrimas cayeran de sus ojos, estaba seguro que eran lagrimas de rabia y no me equivoque cuando volvió a golpear el armario.
-¡JOHN YA BASTA! Grite yo esta vez, me acerque a él y le cogí fuertemente de los brazos, me miro y acto seguido dejo caer sus brazos mientras más lagrimas salían de sus ojos, odiaba verle así, tan débil, así que le abrace, le abrace fuertemente y él se aferro a mí con fuerza.
-¿Por qué tiene que ser así? Dime que hice mal Ed por favor, decía mientras las lágrimas seguían resbalando por sus mejillas y me empapaban la camiseta.
-No lo sé John, solo te digo que hables con ella, intenta entenderla, que te cuente porque su rechazo, le dije suavemente.

El se separo de mi y giro su cabeza hacia la puerta, le vi abrir un poco los ojos entonces me gire para ver qué es lo que mi hermano miraba y menuda sorpresa me lleve, no no podía ser verdad esto cada vez iba a peor, en la puerta de nuestro cuarto se encontraban las chicas, me fije en Sarah, varias lagrimas recorrían sus mejillas mientras Mel nos miraba confundida, ¡Mierda! Lo habían escuchado todo.
Le hice un gesto a mi novia para que se acercara, cuando lo hizo la rodee con mis brazos, Sarah se quedo en la puerta mirando hacia mi hermano.
-¡Que miras! Le espeto así sin más, vi como ella le miraba confundida y mas lagrimas volvían a caer de sus ojos.
-Lo has escuchado ¿verdad? Le pregunto él, más bien le escupió la pregunta, ella asintió débilmente con la cabeza.
-Pues entonces ya sabes lo que pienso al respecto, ella intento acercarse a él pero el retrocedió dejándola aun mas confundida.
-No, no te acerques, no me toques Sarah, no me hables, solo desparece de mi vista, are de cuenta que nunca sentí nada por ti, te olvidare, olvidare todo sentimiento que tenga que ver contigo, notaba la furia en su voz, en sus palabras, el seguía apretando los puños.
Esta vez ella abrió la boca, estaba en shock antes las palabras de mi hermano, aunque yo también, no le reconocía, el nunca le había hablado así nadie, ni si quiera a Nat el día que ella le dejo por otro, mire hacia Mel que lloraba en silencio agarrada a mi cuello, la abrace fuertemente acariciándole la cabeza.
-John. . . susurro Sarah, era la primera vez que hablaba desde que estaba aquí, volvió a acercarse a él y el volvió a retroceder.
-¿Estas sorda? ¡No me hables! Olvídate de mi Sarah porque créeme que yo lo haré contigo, vete, ella se quedo parada en medio de la habitación, -¡¡¡Que te vayas!!! Le grito más alto esta vez.
Sarah salto en el sitio sorprendida, le miro con lagrimas en los ojos, él le aparto la mirada, vi como rompía en llanto y acto seguido se marchaba escaleras abajo y escuchamos un portazo, al final el lo había conseguido, ella se había marchado, note como Mel se separaba de mi y se acercaba a mi hermano, el la miro extrañado y ella sin decir nada le cruzo la cara.
-Eres lo peor John, ¿Cómo se te ocurre hablarle así? Mi hermano se llevo la mano a la mejilla que Mel acababa de abofetearle, -ella estaba dispuesta a decírtelo todo, estaba dispuesta a dejar el rechazo atrás, le dijo ella con rabia.
-Yo. . . intento hablar mi hermano.
-Tu nada John, mas te vale que ella no haga ninguna tontería porque te juro que no te lo perdonare y acto seguido salió de nuestro cuarto y otro portazo se escucho de nuevo.

John se quedo quieto en medio de la habitación mirando por donde Sarah y ahora Mel acaban de irse, le escuche susurrar un “Mierda” se llevo las manos a la cara y se dejo caer al suelo de rodillas, me acerque rápidamente a él y le abrace con fuerza mientras le escuchaba llorar.
-He sido un idiota, repetía una y otra vez, y si lo había sido pero en parte yo le entendía, tiene que ser duro que la persona que amas sienta lo mismo que tu pero lo rechace.
-Tranquilo John, todo se arreglara, le decía para intentar calmarle y de verdad esperaba que todo esto se arreglase ahora que ambos sabían de sus sentimientos.



[Dolida, envuelta en lagrimas ella corría por las calles de Dublín sin rumbo, deseando desaparecer en ese momento, deseando cerrar los ojos y que al abrirlos nada de esto hubiera pasado, repitiéndose a sí misma las palabras que él le había dicho, con la imagen de la persona a la que amaba grabada en su mente]